Muchas personas creen que para liderar un equipo es necesario dejar las emociones a un lado. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. En las siguientes líneas queremos que descubras la importancia de la neurociencia del directivo. Conocerás cómo puedes ser más eficaz en tu puesto.
¿Qué es la neurociencia del directivo?
La neurociencia del directivo le confiere distintas herramientas para desarrollarse como líder. Tanto para tratar con los empleados como para saber llevar a los clientes, es vital descubrir cómo funciona la mente. Es clave para tener claro cómo dirigirse a cualquier persona. Te ayuda a conocer cómo se forman nuevos circuitos neuronales para establecer nuevas formas de trabajo.
La inteligencia emocional aplicada en la vida privada y en la pública se ha tornado como esencial. Cada vez se utiliza en una mayor cantidad de empresas y es clave para saber cómo liderar equipos. Se centra en desarrollar las propias habilidades emocionales y también las de todas personas las que trabajan bajo tus órdenes.
Al igual que en su momento lo hizo la inteligencia emocional, la Neurociencia cada vez se aplica más en el liderazgo directivo. Hasta hace no demasiado tiempo se pensaba que el desarrollo neuronal se daba desde el nacimiento hasta la adolescencia. Después, se empezaban a perder neuronas. Sin embargo, ahora se sabe que no es así y esto permite que se puedan diseñar diferentes acciones para conseguir que el cerebro se siga desarrollando más allá de los tiempos que hemos comentado.
En la actualidad, se tiene claro que en el hipocampo de las personas que están sanas se siguen formando nuevas células. Esto ha llevado a que se pueda conocer mejor la mente humana y se pueda aprovechar mejor todo su potencial.
No hay que olvidar que el hipocampo está estrechamente relacionado tanto con las emociones como con el aprendizaje. A partir de ahí, se pueden desarrollar nuevas conductas y hábitos. Además, parece claro que una persona que está activa y sana crea nuevas neuronas y también nuevos circuitos neuronales.
Es decir, mientras sigues aprendiendo nuevas cosas y te enfrentas a distintos retos, se siguen creando nuevas neuronas y circuitos en tu cerebro. Un ejemplo de lo vital que resulta la neurociencia tiene que ver con los hábitos. Cuando nuestro cerebro adquiere cierto hábito al trabajar, se niega a cambiarlo porque le supone un gasto de energía. Luchar para quitar esa costumbre es casi imposible. ¿Cómo lo puedes conseguir? Es mucho más sencillo aprender un nuevo hábito que sustituya al anterior. Cuando tengas firmemente integrado en tu vida ese nuevo hábito, el otro desaparecerá por sí solo. Por supuesto, tendrás que abandonar el anterior, pero poco a poco se irá de rutina.
¿Qué aspectos importantes muestra la neurociencia del directivo?
La neurociencia va descubriendo poco a poco cómo funciona un órgano tan complejo como el cerebro humano, estos son algunos puntos interesantes:
• Las personas sí cambian y lo hacen constantemente.
• El cerebro no funciona como un ordenador, además de su parte racional, tiene una parte emocional. Es imposible solo utilizar la parte racional.
• Si se busca influir en el comportamiento de otras personas, hay que tocar sus emociones.
• Las emociones siempre influyen en las compras, por eso, las campañas más efectivas de marketing son las que tocan el corazón de los clientes.
La neurociencia del directivo es una cuestión tan importante que marca la diferencia entre un profesional que cumple sus objetivos y otro que no lo hace. Cada vez se aplica más en el mundo empresarial y es algo que marcará en buena medida el futuro de los equipos profesionales. ¿Le estás sacando ya el máximo partido?
